Qué hacemos Casos de éxito

Christian Juárez, una persona decidida, se presentó al Proyecto ARRIBA en julio de 2013. Entonces tenía 21 años y era el mayor de cuatro hermanos. Su madre, monoparental, luchaba por llegar a fin de mes y la familia seguía viviendo en un centro de acogida.

Cuando la gestora de casos, Mimi Duran, conoció a Christian durante la admisión, descubrió que era sordo y que tenía el estatus DACA. Sus ingresos eran mínimos, pero su determinación de tener éxito y sacar a su familia de sus dificultades financieras era evidente. A pesar de enfrentar desafíos significativos, el objetivo de Christian era claro: completar la escuela de enfermería, asegurar un empleo y mantener a su familia.

Christian cumplía los requisitos para recibir ayuda del Proyecto ARRIBA. Cuando se disponía a marcharse, se dirigió al gestor de su caso con una sentida petición. Christian acababa de conseguir un pequeño apartamento después de vivir en un centro de acogida, pero la familia tenía muy pocos muebles. Buscaba camas para sus hermanos y su madre. En un momento fortuito, el personal de la organización reveló que tenían muebles almacenados y que estaban dispuestos a donárselos a Christian. Ese fin de semana, el personal y algunos voluntarios cargaron sus camiones y llevaron los muebles al apartamento de Christian.

Éste fue sólo el principio de los obstáculos a los que se enfrentó Christian durante sus estudios de enfermería. A pesar de no tener acceso a Internet en casa y de no poseer vehículo, pasó incontables horas en el Proyecto ARRIBA, utilizando Internet y los ordenadores del aula de la organización. Cuando terminaba, caminaba hasta la cercana terminal de autobuses, a una manzana del Proyecto ARRIBA. Su inquebrantable determinación alimentaba su persecución de un sueño que trascendía la adversidad. A pesar de numerosos sacrificios, desafíos educativos y luchas familiares, Christian logró un hito importante: graduarse de la Escuela de Enfermería de UTEP en mayo de 2016.

Su viaje continuó en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del University Medical Center, donde empezó a trabajar en enero de 2017. Christian pronto se dio cuenta de que el entorno de la UCI no era el adecuado para él y solicitó el traslado a otra unidad. Christian se encontró en la unidad maternoinfantil, donde pasó los siguientes cuatro años. Su atención compasiva le granjeó el cariño de colegas y pacientes por igual.

En febrero de 2021, Christian aprovechó la oportunidad de pasar a Urgencias. Desde entonces, ha prosperado en este entorno dinámico. En diciembre de 2023, la dedicación de Christian marcó otro hito: se convirtió en enfermero jefe. Con este ascenso llegaron responsabilidades adicionales, y Christian obtuvo la certificación como enfermero jefe de Urgencias.

A pesar de los problemas relacionados con su discapacidad y el habla, la resistencia de Christian no hizo sino alimentar su determinación. Compró un coche e incluso consiguió una casa para su madre. Su duro trabajo le permitió explorar el mundo viajando. A lo largo de su trayectoria, Christian sigue estando agradecido al Proyecto ARRIBA, la organización que le apoyó durante su carrera de enfermería. Atribuye su éxito a la intervención divina, reconociendo que Dios ha sido el centro de su vida y sus esfuerzos.

UMC ha sido más que un lugar de trabajo para Christian: ha sido un lugar de crecimiento, aprendizaje y transformación. Su historia ejemplifica el poder de la perseverancia y el impacto del apoyo de la comunidad.

Christian es un verdadero testimonio de que cuando necesitas y quieres algo, nunca dejarás que absolutamente nada se interponga en tu camino. Tengo una verdadera admiración por él y por lo lejos que ha llegado.